La feria máquina herramienta acaba de
cerrar sus puertas después de 6 días intensos con lo último en tecnología y en
procesos de fabricación, habiendo generado más ventas potenciales que con
cualquier otra herramienta de ventas.
Comentar que esta feria ha estado muy
volcada y bien organizada en facilidades a nivel empresa con packs de vuelos,
traslados y reservas de alojamiento. A nivel de usuario, para visitar la feria
sin invitación, el precio por persona
era de 25 euros. Un precio que en principio puede parecer poco asequible para
aquellas personas que quisieran visitar la feria y no vinieran del mundo de la
empresa. Probablemente esto se debe a que es una feria orientada a
profesionales del sector y al mundo de la empresa en general; por lo tanto, una
feria diferente a las relacionadas con el ocio y las vacaciones. Estas, sí
tiene como destinatarias finales a personas particulares.
1100 organizaciones expositoras, visitantes
provenientes de 30 países con ganas de ver el buen funcionamiento de las
máquinas robot, negociar, curiosear, conocer mejor a la competencia y abrir
puertas a posibles negocios. Todo un logro y una oportunidad de oro para la industria
en general, un escaparate inmejorable
para darse a conocer en el mercado.
En Euskadi el sector industrial es
esencial, y además es referente en la producción de máquinas herramientas. Cuenta
con un plan de industrialización donde se quiere reforzar más este sector para
generar más empleo.
Cada empresa se volcó en dar a
conocer su nuevo proyecto, explicando su labor en el mercado mientras
agasajaban a las personas y organizaciones visitantes con detalles de
merchandising y publicidad. Una fórmula habitual en las ferias para acoger a
quienes la visitan y generar una relación cordial desde un primer momento.
Las empresas industriales más
importantes y más conocidas no pudieron faltar a la cita, pero también fue la
oportunidad para aquellas menos conocidas y quizás más pequeñas que exponían
por primera vez en el BEC.
Este evento ha servido para dar a
conocer novedades empresariales, presentar proyectos y abrir mercado con nuevos
países. El eslogan lo decía claro: ofrecer una gran feria, con grandes
soluciones para hacer grandes negocios.
Como dato curioso, comentar que hubo
gente que ha ido a la feria en busca de empleo.
Iraultza
Ibaibarriaga
Harreragilea/recepcionista
de Urune hotela
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